Sudamérica se abre al cannabis

Sudamérica se abre al cannabis

La legislación sobre el cannabis en Sudamérica ha experimentado una notable y rápida evolución en las últimas semanas. Mientras que muchos países norteamericanos todavía andan a tientas con normativas a menudo restrictivas, sus homólogos sudamericanos han adoptado un enfoque más abierto y progresista. Varias naciones han dado pasos decisivos despenalizando la posesión de cannabis, autorizando su uso con fines médicos y regulando su cultivo y venta comercial para permitir el acceso de los adultos.


Chile, por ejemplo, está en proceso de abrir un diálogo nacional sobre la legalización del cannabis, lo que marca un importante punto de inflexión en la región. Esta iniciativa demuestra la voluntad del país de mirar más allá de las ideas preconcebidas y considerar los beneficios potenciales de esta controvertida planta. Las discusiones en curso subrayan la importancia de un debate abierto e informado para abordar las cuestiones relacionadas con la legalización del cannabis.


Mientras tanto, Colombia también se acerca a la legalización del cannabis, con una votación inminente sobre el tema. Si se aprueba, supondrá otro importante paso adelante para Sudamérica. Colombia reconoce el potencial económico de la planta e intenta establecer un marco jurídico claro para regular su uso y comercialización.


Estos últimos acontecimientos dan fe de una rápida evolución y un cambio de actitud en Sudamérica hacia el cannabis. La región parece dispuesta a explotar los potenciales beneficios económicos y médicos de la planta, asegurando al mismo tiempo una regulación adecuada que garantice la seguridad y la protección de los consumidores.


Prohibición: los retos de la legislación sobre cannabis en Sudamérica

En la mayoría de los países sudamericanos, el cultivo, la distribución y el consumo de cannabis siguen estando prohibidos. Sin embargo, cabe señalar que algunos países han avanzado despenalizando la posesión de pequeñas cantidades de cannabis para uso personal. Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México y Perú son algunos de los países que han despenalizado el cannabis. Esto significa que si te encuentran en posesión de cannabis para uso personal, te pueden multar, pero no te detendrán ni te encarcelarán.


Sin embargo, es importante señalar que en otros países de la región, el cultivo de cannabis para uso personal sólo está permitido si es con fines médicos. Entre estos países se encuentran Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú. No todos los países sudamericanos permiten la compra legal de semillas de cannabis para su cultivo en exterior o interior. Antes de embarcarse en una actividad de este tipo, es esencial comprobar la legislación vigente en su país de residencia.
 

La persistencia de la prohibición en muchos países latinoamericanos plantea grandes desafíos. Los partidarios de la legalización del cannabis argumentan que la prohibición conlleva consecuencias perjudiciales, como la criminalización de los consumidores, el desarrollo del mercado negro y la perpetuación de las desigualdades sociales. Argumentan que regular y legalizar el cannabis permitiría controlar mejor su producción, distribución y consumo, al tiempo que generaría importantes ingresos fiscales.


Sin embargo, los detractores de la legalización señalan su preocupación por la salud pública, la seguridad vial y los posibles efectos sobre los jóvenes. También señalan los retos que plantea la regulación y supervisión de un mercado legal de cannabis. Por lo tanto, la cuestión de la prohibición sigue siendo un debate complejo y polarizado en Sudamérica, con posiciones que varían según el país y los actores implicados.
 

En este contexto, los debates sobre la legalización del cannabis en Chile y la posibilidad de una votación inminente en Colombia son ejemplos concretos de los retos y problemas a los que se enfrenta la región. Por lo tanto, el futuro de la legislación sobre el cannabis en América del Sur sigue siendo incierto, y el tema continúa generando un apasionado debate en las sociedades y los gobiernos de toda la región.

Cannabis medicinal: la industria terapéutica florece en Sudamérica

La industria del cannabis medicinal está en auge en Sudamérica, ofreciendo numerosos beneficios terapéuticos a los pacientes de la región para el tratamiento y la gestión de diversos problemas de salud.
 

En Colombia, donde el cannabis medicinal se legalizó en 2017, el Gobierno se ha comprometido a ampliar el acceso a esta forma de tratamiento. Se han puesto en marcha medidas como la autorización del cultivo doméstico, el establecimiento de nuevas políticas para fomentar la producción y exportación de variedades de cannabis con alto contenido en CBD, así como el rápido registro de empresas para la producción de cannabis medicinal. El país también ha legalizado el consumo de cannabis medicinal para un total de 420 afecciones médicas diferentes, como el trastorno de estrés postraumático, el dolor crónico y la enfermedad de Parkinson. Los pacientes deben obtener primero una recomendación médica y después comprar cannabis a productores autorizados que cultivan la planta bajo distribución comercial regulada.


Este importante avance en Colombia atestigua el creciente reconocimiento de los beneficios terapéuticos del cannabis en la región. Cada vez más pacientes latinoamericanos recurren a esta alternativa para aliviar sus síntomas y mejorar su calidad de vida. La industria del cannabis medicinal en Sudamérica ofrece, por tanto, nuevas oportunidades económicas, al tiempo que permite a los pacientes acceder a tratamientos más naturales y eficaces.


Sin embargo, hay que tener en cuenta que la normativa en torno al cannabis medicinal varía de un país a otro de Sudamérica. Algunos países han adoptado políticas más restrictivas, mientras que otros han adoptado medidas más progresistas para facilitar el acceso de los pacientes a tratamientos basados en el cannabis. Esta diversidad normativa refleja los debates en curso sobre la legitimidad y eficacia del cannabis medicinal, teniendo en cuenta al mismo tiempo consideraciones de seguridad y salud pública.

Chile abre un prometedor diálogo sobre la legalización del cannabis

Chile ha dado un paso importante hacia la legalización del cannabis, tanto para fines medicinales como recreativos, con la apertura de un diálogo constructivo entre las diputadas Marcela Riquelme y Ana María Gazmuri, el Fiscal Nacional Ángel Valencia y el director de la unidad especializada en la lucha contra el crimen organizado, Ignacio Castillo.


En la reunión, el diputado Gazmuri destacó los retos asociados a la aplicación de la legislación antidroga, en particular la nueva disposición de la Ley 20.000, que autoriza el cultivo médico de cannabis. Esta reunión es una señal positiva del compromiso de los actores políticos para debatir las cuestiones relativas al cannabis con un espíritu constructivo.
 

El Fiscal Nacional ha expresado su voluntad de aplicar la ley correctamente y de actualizar las recomendaciones de investigación de los fiscales en los casos de tráfico de drogas. Debe hacerse una clara distinción entre el uso personal y el uso con fines médicos, teniendo en cuenta la nueva ley introducida.


Este avance marca el fin de muchos años de lucha por parte de la sociedad civil y el Congreso. La modificación reglamentaria de la Ley 20.000 a favor de los usuarios de cannabis se considera un paso importante para evitar la persecución injustificada de pacientes y usuarios.


La apertura del diálogo sobre el cannabis entre los diputados, el fiscal nacional y la unidad especializada en la lucha contra el crimen organizado es un paso fundamental hacia el establecimiento de un marco jurídico más inclusivo y equitativo para la comunidad cannábica en Chile. Esta reunión podría ser el punto de partida para futuras colaboraciones y políticas que beneficien tanto a los pacientes que requieren cannabis con fines médicos como a los consumidores recreativos adultos.
 

Es alentador ver que Chile reconoce la importancia de dar voz a los consumidores de cannabis y de trabajar hacia un enfoque más progresista que respete los derechos individuales. Este diálogo dinámico abre nuevas oportunidades para el desarrollo de un marco normativo adaptado a las necesidades de la población chilena en materia de cannabis, tanto medicinal como recreativo.

La legalización del cannabis en Colombia, a punto de votarse

El proceso de legalización del cannabis en Colombia alcanzó un hito importante al aprobarse el proyecto de ley en la penúltima votación en el Senado el martes 6 de junio de 2023, con lo que el país está un paso más cerca del fin de la prohibición.
 

El proyecto de ley presentado por el diputado Juan Carlos Losada Vargas y aprobado previamente por la Cámara de Representantes recibió el visto bueno de la Comisión Primera del Senado por 15 votos a favor y 4 en contra, lo que supone el séptimo de los ocho votos necesarios para que la propuesta de reforma constitucional sea remitida al Presidente.


El último paso es la votación final del Senado, prevista para el 16 de junio. Si se aprueba el proyecto, los legisladores tendrán menos de una semana para llevar a cabo una conciliación bicameral antes de que finalice el periodo de sesiones.


El proyecto de ley sobre la legalización del cannabis apoya el derecho al libre desarrollo de la personalidad al permitir a los ciudadanos decidir sobre el consumo de cannabis dentro de un marco legal regulado. También pretende reducir el trato arbitrario, discriminatorio o desigual de las personas que consumen cannabis. El proyecto de ley también aboga por campañas de educación pública y la promoción de servicios de tratamiento de adicciones.
 

El año pasado, la Cámara de Representantes ya había dado su aprobación inicial al proyecto de legalización, y el Ministro del Interior también había expresado entonces su apoyo a la reforma. Esta votación se produce tras el avance de la medida en una comisión del Congreso, así como de otro proyecto de legalización.


El presidente Gustavo Petro, un progresista que desde su investidura en agosto ha hecho campaña activamente por el fin de la criminalización de las drogas a escala internacional, ha hablado de los beneficios potenciales de la legalización del cannabis. El año pasado pronunció un discurso en una reunión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el que pidió a los países miembros que se replantearan radicalmente su enfoque de la política de drogas y pusieran fin a la prohibición.


El presidente Petro también destacó la posibilidad de legalizar el cannabis en Colombia para reducir la influencia del mercado ilícito. También habló de liberar a las personas actualmente encarceladas por posesión de cannabis una vez que la legalización esté en marcha.


El potencial económico de una industria legal del cannabis fue subrayado por el Presidente, que mencionó las pequeñas localidades de Los Andes, Corinto y Miranda como posibles beneficiarias del cultivo legal de cannabis, sin necesidad de licencia.


El presidente Petro también ha manifestado su interés por la idea de exportar cannabis a otros países donde se ha legalizado. El año pasado se reunió con el Presidente de México, y ambos dirigentes anunciaron su intención de reunir a otros líderes sudamericanos en una conferencia internacional para "redefinir y replantear la política de drogas" debido al "fracaso" de la prohibición. Los legisladores mexicanos también pretenden legalizar las drogas a escala nacional.