CBD y embarazo: ¿son compatibles?

CBD y embarazo: ¿son compatibles?

El embarazo. Un acontecimiento especialmente maravilloso, pero igual de restrictivo. Más allá de la emoción que conlleva, el embarazo obliga a vigilar de cerca la salud de la madre y del feto. Todos los alimentos, líquidos y sustancias que se ingieren, e incluso las cremas que se aplican sobre el cuerpo, se examinan escrupulosamente para descartar cualquier riesgo para el bebé en desarrollo.

El CBD es conocido por sus efectos terapéuticos, pero no deja de ser una sustancia especial. No es un narcótico, ni mucho menos, pero sigue siendo un producto con efectos intensos. Entonces, ¿qué pasa con la idea de consumir CBD durante el embarazo? ¿Es una buena o mala idea? ¿Existe algún riesgo?

Le daremos todos los detalles que necesita para tomar la decisión correcta.

CBD, definición

Cannabis Sativa. Éste es el nombre que hay que recordar. Es el nombre en latín de la famosa planta del cáñamo. Produce lo que se conoce como cannabinoides, entre ellos THC, CBN y CBD.

El CBD y el THC proceden de la misma planta, pero no deben confundirse. El THC se asocia con la euforia y los efectos psicotrópicos, mientras que el CBD se promociona por sus beneficios para la salud sin efectos secundarios adversos. Uno se utiliza para colocarse, mientras que el otro proporciona alivio.

Un detalle de primer orden: el CBD ha sido legalizado en España, al igual que en la mayoría de los países europeos. Esta legalización ha sido posible tras muchos años de debate y estudios científicos de todo tipo. LA OMS también participó en estos debates sobre el CBD, destacando sus efectos terapéuticos y la ausencia de peligros asociados a su consumo, incluso de forma habitual.

Al CBD se le atribuyen numerosos beneficios para la salud, por lo que goza de un amplio reconocimiento. Los más notables son sus efectos antiinflamatorios, analgésicos, antidepresivos y relajantes. También cabe destacar que el CBD no presenta ningún riesgo de adicción.

Cambios en el cuerpo durante el embarazo

El embarazo no es ni mucho menos un acontecimiento trivial para el cuerpo de una mujer. Todo lo contrario. Las hormonas, el sistema cardiovascular, el funcionamiento de los órganos, los mecanismos cerebrales, el comportamiento muscular... todas las partes del cuerpo sufren un auténtico trastorno.

Las hormonas son, sin duda, el tema más discutido cuando se trata del embarazo. Cuando una mujer está embarazada, su equilibrio hormonal cambia considerablemente. Las hormonas son ante todo moléculas que influyen directamente en todos los órganos. Actúan como mensajeros e influyen en diversas funciones corporales como la reproducción, el crecimiento, el estado de ánimo, el metabolismo y el sueño.

Dos semanas después del inicio del embarazo, los niveles hormonales alcanzan un máximo, antes de empezar a descender bruscamente. La placenta se encarga entonces de producir progesterona y estrógenos, dos hormonas esenciales para el desarrollo sano del feto. Durante este periodo, la embarazada está sometida a variaciones incontroladas del apetito, la calidad del sueño y el estado de ánimo. Y estos son sólo algunos ejemplos.

En términos más generales, los pulmones y el corazón se ven fuertemente estimulados durante el embarazo. El volumen sanguíneo de una mujer embarazada aumenta de 2.600 ml a 3.400 ml, y su tensión arterial desciende considerablemente. Desde el punto de vista respiratorio, el embarazo puede ir acompañado rápidamente de hiperventilación y mareos. Teniendo esto en cuenta, y la imposibilidad de tomar cualquier tipo de medicación, cada vez más mujeres embarazadas se interesan por el tema del CBD.

Embarazo: ¡nunca fumes CBD!

Si estás embarazada, lo primero que debes evitar radicalmente es fumar. Sea cual sea la sustancia. Tabaco, e-liquid vaporizado, cannabis, CBD, no hay distinción. En cuanto se consume una sustancia mientras se fuma, la buena marcha del embarazo y la salud del bebé corren un grave riesgo.

Pueden producirse consecuencias como abortos, partos prematuros o retrasos en el desarrollo. Por ello, se recomienda formalmente a las mujeres embarazadas que no fumen. Incluso el CBD, a pesar de sus efectos terapéuticos.

Otros productos a base de CBD

High Society ha desarrollado una gama de productos a base de CBD que se adapta a cada perfil de consumidor. Aceites, cosméticos, infusiones, flores, extracciones... La oferta es enorme. Pero, ¿qué ocurre con las mujeres embarazadas? ¿Es posible consumir cualquier forma de CBD durante el embarazo?

La respuesta es no. No todos los productos tendrán el mismo impacto en el organismo, y lo mismo ocurre con las diferentes concentraciones de CBD. Por ejemplo, cuanto mayor sea la concentración de un aceite de CBD, más intensos serán sus efectos. Esto es especialmente cierto en el caso del aceite de CBD al 10. Otro ejemplo son los cosméticos Cosméticos a base de CBD, que permiten disfrutar de los efectos relajantes del CBD simplemente aplicándolo sobre la piel.

Por lo tanto, el riesgo para el embarazo de consumir CBD directamente por ingestión o simplemente por aplicación local sobre la piel no es el mismo. Como norma general, le recomendamos encarecidamente que primero consulte a su médico, ginecólogo o matrona.

Falta de perspectiva científica

Sería un error afirmar que el CBD no supone ningún riesgo para el embarazo. Por el momento, no disponemos de suficientes pruebas científicas sobre esta cuestión. Por lo tanto, sigue habiendo un interrogante sobre el tema del CBD y el embarazo.

La molécula del cannabidiol se estudia desde hace pocos años. Este tiempo ha permitido analizar los efectos del CBD sobre la salud, y su capacidad para aliviar el estrés, la artrosis e incluso los síntomas de la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, el caso del consumo de CBD durante el embarazo aún no se ha estudiado en profundidad.
No se han descartado en absoluto los riesgos de que este consumo tenga efectos nocivos sobre el crecimiento del bebé, por lo que se impone la prudencia.