

Hoy, vamos a presentarte una receta simple y rápida para que puedas hacer tu propio jarabe de CBD. Así podrás usarlo como ingrediente en tus recetas favoritas, para un sabor más delicioso y, sobre todo, para aprovechar todos los beneficios del CBD.
La receta del jarabe de CBD:
Ingredientes (para 100 ml de jarabe):
1ª etapa: la descarboxilación de las flores de CBD
Primero, para que el CBDA se transforme en CBD, hay que descarboxilar los 2 g de flor. Para ello, nada más sencillo. Precaliente su horno a 110°C y luego desmenuce sus flores sobre una bandeja de horno cubierta con papel de hornear. Cuando el horno esté caliente, coloque la bandeja con las flores dentro y deje cocer durante 40 minutos.
Este proceso activará el CBD para que sea biodisponible y así más fácil de asimilar. Esto le permitirá disfrutar de todos los beneficios del CBD que contienen las flores.
2ª etapa: la preparación del jarabe de CBD
En una cacerola, ponga el agua y el azúcar, luego caliente a fuego medio.
Cuando el agua comience a hervir a fuego lento, añada las flores de CBD descarboxiladas.
Ponga a fuego lento y deje cocer a fuego lento durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando. Es importante no dejar que el agua hierva porque eso causará una pérdida de los activos de la molécula.
Cuando hayan pasado 30 minutos, añada la glicerina y luego remueva durante 5 minutos. La adición de glicerina en el jarabe permitirá que el CBD se fije al cuerpo lipídico de esta para que sea asimilable por nuestro cuerpo.
3ª etapa: la fase final de la preparación del jarabe de CBD
Deje enfriar el jarabe colocándolo en un lugar protegido de la luz y a temperatura ambiente.
Una vez que el jarabe de CBD esté a temperatura ambiente, le recomendamos transferirlo a una botella hermética. Esto permitirá una mejor conservación del mismo.
¿Cómo usar el jarabe de CBD?
El jarabe de CBD puede usarse en la cocina, como un ingrediente.
Podrá usar su jarabe para embellecer sus cócteles y bebidas o también para dar a sus platos sabores originales. Si le gusta lo agridulce, el jarabe de CBD será un perfecto aliado para añadir un ligero sabor a cáñamo en sus preparaciones culinarias.
Disfruta de un aroma a cáñamo en tus pasteles o tus dulces favoritos, y pon a prueba tu imaginación para aprovechar plenamente sus virtudes de manera deliciosa y cautivadora.
¿Cuáles son los beneficios del CBD:
Cuando consumimos CBD en forma alimentaria, tarda más en actuar en nuestro organismo que cuando se inhala o se toma en forma de aceite sublingual. De hecho, aunque el tiempo de asimilación del cannabidiol sea más largo, los efectos serán más localizados. La molécula siendo digerida, actuará apuntando más particularmente al sistema digestivo del consumidor. Es una buena alternativa para personas que sufren dolores a nivel digestivo.
Los efectos generales del CBD actúan sobre el estrés, la ansiedad y el estado de ánimo. A veces, cuando estamos estresados, ansiosos o de mal humor, tenemos "el nudo en el estómago". Por eso, el consumo de CBD a través de los alimentos puede combatir estos efectos indeseados y permite una relajación profunda así como una calma muy apacible, estimulando la producción de melatonina.
Las virtudes del CBD son numerosas y actúan ampliamente en todo nuestro organismo. Por ejemplo, el CBD sería un excelente antiinflamatorio y podría aliviar ciertas enfermedades como la artrosis, la esclerosis múltiple, los dolores articulares, ... También podemos destacar su calidad como antioxidante. De hecho, el cannabidiol reduciría la actividad de las glándulas sebáceas, las glándulas responsables de la producción de acné.
¿Por qué usar CBD en la cocina?
En la cocina, el uso del cannabidiol muestra varios beneficios y ventajas. Primero, es un excelente potenciador del sabor. Permite realzar los diferentes sabores de un plato como podrían hacerlo el tomillo, el romero u otras hierbas aromáticas. Puede usarse de diferentes maneras siempre que el CBD esté descarboxilado (activación del CBD de la flor mediante su paso por el horno), y luego mezclado con una grasa (como leche, mantequilla, crema, ...). El CBD es hidrófobo pero lipófilo, por lo que solo puede unirse a las grasas.
También podemos consumir esta molécula en forma de aceite. Lo que permite incorporarla en recetas simples como el aderezo o el guacamole, por ejemplo.
Finalmente, también podemos usar muy bien la resina de CBD para realzar ciertas salsas. Puedes usar el cáñamo en la elaboración de bebidas con un sabor único, o incluso integrando nuestra miel asombrosa que ya posee todos los activos que permiten la asimilación de la molécula en tus recetas icónicas.
También podrás incorporar la dosis de CBD que desees para obtener la concentración deseada.
Y sobre todo, no olvides que el CBD se asimila perfectamente con una grasa corporal ¡es indispensable para aprovechar sus beneficios.