Conocida y practicada desde hace muchos años, la extracción con disolventes es rápida y fácil de realizar. El proceso es siempre el mismo y consiste en introducir el material vegetal en alcohol para que los tricomas se diluyan en él.
¿Cuáles son los riesgos de esta técnica de extracción con alcohol? Te lo contamos todo en este artículo.
¿Qué alcoholes se pueden utilizar para extraer CBD?
Para extraer el CBD del alcohol se suelen utilizar dos tipos de alcohol. Son el alcohol isopropílico y el etanol. Muy a menudo, es el etanol (sin desnaturalizar) mucho más seguro para la salud.
Cuando se utiliza alcohol isopropílico, el proceso se denomina QWISO (Quick Wash Isopropyl). Por otro lado, si se utiliza etanol, el proceso se denomina QWET (Quick Wash Ethanol).
Para extraer la máxima cantidad de cannabinoides y terpenos, es aconsejable lavar siempre rápidamente y no calentar directamente el alcohol y el material vegetal. El alcohol es un disolvente polar. En consecuencia, si el proceso de lavado se prolonga o se aplica una fuente de calor directa, también se extraerán sustancias hidrosolubles como la clorofila.
La primera recomendación es utilizar el material vegetal más seco posible. Se puede secar de la forma tradicional, pero también se puede secar en un horno a una temperatura de 90ºC, hasta que las cabezas se deshagan entre los dedos.
Al mismo tiempo, la hierba se descarboxila y los cannabinoides pierden su forma ácida y se vuelven psicoactivos, sin necesidad de vaporizarlos o quemarlos para sentir sus efectos.
Hay que señalar que la mayoría de las personas que utilizan esta técnica recurren mucho más al etanol porque es menos tóxico (sobre todo cuando se trata de pequeñas cantidades).
Los riesgos de extraer CBD con etanol u otros alcoholes
A pesar de que la extracción con disolventes es ideal para uso oral, presenta ciertos riesgos que conviene destacar.
En primer lugar, hay que señalar que el método de extracción con alcohol es peligroso porque es inflamable. Puede producir vapores nocivos. Por lo tanto, es importante manipularlo con cuidado para evitar cualquier incidente.
Es más, extraer el CBD con alcohol también puede extraer la clorofila de la planta.
Esto altera la calidad del resultado final y da un sabor amargo al producto extraído. En consecuencia, esta técnica de extracción reduce considerablemente o incluso anula todos los efectos terapéuticos contenidos en el extracto de CBD.
Dado que este método puede dañar los terpenos, es preferible utilizarlo para crear aislados de CBD.
Por otro lado, a pesar de que esta técnica de extracción es menos costosa y accesible tanto a particulares como a profesionales, no elimina completamente los residuos de disolventes en el extracto obtenido.
En definitiva, el método de extracción del CBD mediante etanol y otros alcoholes es ventajoso en muchos aspectos.
Sin embargo, presenta riesgos significativos. Por ello, algunas personas se abstienen de utilizarlo para extraer CBD de la planta de cáñamo, prefiriendo en su lugar el método de extracción con CO2.