

El cannabidiol o CBD es una variedad de cannabinoides que se encuentra en el cannabis. Vendido legalmente, este producto posee importantes virtudes sobre el cuerpo humano, especialmente cuando se infunde. Aquí algunos de los beneficios de una infusión de CBD.
Un excelente medio para digerir
Antes que nada, hay que saber que el cuerpo humano está dotado de una red de receptores llamada sistema endocannabinoide. Los receptores de este sistema se encuentran por todo el cuerpo, incluso en las vías digestivas. La infusión de CBD actúa directamente sobre estos receptores y sus efectos se multiplican. El cannabidiol permite, entre otras cosas:
- Mejorar el tránsito digestivo y así evitar el estreñimiento.
- Tratar los calambres.
- Aliviar las quemaduras.
- Inhibir las ganas de vomitar.
- Evitar los reflujo ácido.
Consumir una infusión de CBD aporta más beneficios al cuerpo que inhalar su vapor.
Una propiedad antiinflamatoria y un analgésico muy eficaz
En algunos países, el cannabidiol se utiliza por razones de salud. El hecho es que este producto logra aliviar ciertos males, sin efectos secundarios. De hecho, el CBD tiene la capacidad de impedir la acumulación de glucosa en las células responsables de las inflamaciones. Así, inhibiría la liberación de sustancias inflamatorias en el organismo. Algunas enfermedades como la artritis o la esclerosis múltiple pueden ser aliviadas gracias a una infusión de CBD. El producto constituye un buen medio para fortalecer el sistema inmunológico.
Las infusiones de CBD también se usan como analgésicos. Una vez ingeridas, las moléculas de cannabidiol se fijan en los receptores cannabinoides. Así impactan directamente en los dolores, ya sean articulares o musculares.
El CBD suprime las percepciones nociceptivas que generan los dolores. Por lo tanto, es una alternativa natural altamente eficaz para personas deportistas o aquellas que sufren de reumatismos. Además, el cannabidiol también actuaría sobre los dolores menstruales de las mujeres.
El CBD para reducir el estrés y relajarse
Las infusiones de CBD son muy recomendadas para personas con mucho estrés. El efecto del producto es lento, pero se instala de forma duradera. Esta es una de las razones por las que las infusiones son preferidas a otros métodos de consumo del cannabidiol.
La infusión de CBD también tiene la ventaja de ser atemporal. Puede tomarse temprano en la mañana y durante todo el día. Asociada a otros métodos de relajación como el yoga, su eficacia se multiplica. Una infusión de cannabidiol permite relajarse y mejorar la calidad del sueño. Tomarla unas horas antes de acostarse es un excelente modo de calmar los nervios y dormir un sueño más profundo. El CBD también permitiría a sus consumidores tener una mejor capacidad de concentración.
Una protección cognitiva asegurada y ningún riesgo de sobredosis
El CBD tendría un impacto positivo en las neuronas. Es un remedio eficaz contra el deterioro cognitivo. También se utiliza en tratamientos para enfermedades como la epilepsia, la enfermedad de Parkinson o el cáncer. El CBD no constituye en ningún caso un tratamiento para estas enfermedades. Pero permite reducir la intensidad del dolor y las crisis. Los enfermos pueden así vivir mejor con estos trastornos. La infusión de CBD también es eficaz contra la paranoia y los estados depresivos.
Además, el CBD infusionado puede consumirse en cualquier momento y lugar. No hay riesgo de exceder la dosis, porque el producto no tiene efecto psicoactivo en el cerebro. Por lo tanto, no hay riesgo de dependencia. Puedes empezar tomando una taza de tu infusión por la mañana y otra por la noche. Luego, a medida que la consumas, podrás aumentar las dosis según tus necesidades.
Las infusiones de CBD seguramente te ayudarán a sentirte mejor. Así que no dudes en añadirlas a tus tratamientos para mejorar tu bienestar.