

¿Su hijo parece ansioso, con síntomas como hiperactividad, trastornos del sueño o fobia escolar? Ante esta situación, ¿se pregunta si el CBD podría ser una solución para calmarlo? ¿Pero es realmente prudente considerar esta opción?
El CBD, un compuesto natural derivado del cáñamo, está ganando popularidad debido a sus propiedades potenciales para aliviar diversas afecciones. Sin embargo, la cuestión del uso del CBD en niños genera preocupaciones en muchos padres. Aunque el consumo de productos a base de CBD es legal en Francia, es esencial examinar las recomendaciones y preocupaciones de los profesionales de la salud. Este artículo analiza las razones por las cuales no se recomienda dar CBD a los niños, basándose en la experiencia de profesionales de la salud calificados.
CBD en niños: Las opiniones divergentes de los padres
La actitud de los padres hacia el CBD en niños suscita un debate animado. Según una encuesta nacional realizada por el hospital infantil C.S. Mott de la Universidad de Michigan, las opiniones son variadas. La mayoría de los padres considera que el uso del CBD debería estar regulado por una prescripción médica, mientras que una pequeña proporción (7%) ya ha dado o considera dar CBD a sus hijos con fines médicos.
El uso del CBD en niños es un tema complejo que plantea preguntas sobre su eficacia, seguridad y legitimidad médica. Algunos padres recurren al CBD con la esperanza de encontrar alivio para sus hijos, mientras que otros adoptan un enfoque más prudente y prefieren una supervisión médica.
Es importante señalar que el CBD, aunque se presenta como una solución natural, requiere una comprensión profunda de sus efectos potenciales en los niños. Las opiniones divergentes reflejan la falta de consenso científico sobre el uso del CBD en pacientes jóvenes.
"El CBD en menores en Francia: Entre la ausencia de datos científicos y la opinión médica desfavorable"
En Francia, aunque el consumo de cannabidiol no está prohibido, está fuertemente desaconsejado para menores. Sin embargo, esta restricción no siempre está claramente indicada en las etiquetas de los productos vendidos en tiendas especializadas o en línea. Algunos padres, con la esperanza de ayudar a su hijo ansioso, pueden sentirse tentados a comprar aceites o bálsamos a base de CBD. Paralelamente, un adolescente en busca de relajación puede fácilmente conseguir cannabidiol sin informar a su entorno.
Desafortunadamente, la ausencia de datos científicos dificulta la comprensión de sus verdaderas ventajas y de los posibles efectos indeseados. Dos profesionales de la salud explican por qué se oponen a su uso en jóvenes.
"Lo que dicen los profesionales"
A pesar de los supuestos beneficios del CBD ampliamente difundidos, no existe ninguna prueba específica de sus efectos en los niños. En realidad, no se ha realizado ningún estudio sobre el uso no farmacéutico del CBD en la población general, especialmente en los jóvenes.
La Dra. Joëlle Micallef, profesora de farmacología en Marsella, explica que existen dos tipos de cannabidiol. Uno está específicamente destinado a un uso médico y ha recibido una autorización de comercialización en casos bien definidos. Y el otro son los productos vendidos en tiendas especializadas o en línea que escapan al marco médico.
"A diferencia de los medicamentos, no cumplen con las normas de calidad, fabricación y contenido", precisa la presidenta de la red francesa de addictovigilancia dirigida por la Agencia del Medicamento (ANSM).
"Su puesta en el mercado está sujeta a una regulación menos estricta que la de los productos de salud supervisados por las autoridades sanitarias. Es importante recordar que el término "natural" no garantiza la ausencia de peligros para la salud."
"Desde el momento en que se supone que una sustancia tiene un efecto sobre cualquier función del organismo, esto puede ser beneficioso, pero también puede causar efectos indeseados. Por eso son necesarios los estudios clínicos", estima la pediatra Catherine Salinier.
También conviene recordar que el cerebro de los niños está en plena maduración, lo que los hace potencialmente más vulnerables.
CBD y niños: Las razones esenciales para evitar su uso temprano
El uso de CBD en menores suscita cada vez más interés y preguntas entre los padres. Sin embargo, cuando se trata de administrar CBD a los niños, es crucial entender por qué es preferible no hacerlo demasiado pronto. De hecho, existen varios factores importantes a considerar para garantizar la seguridad y el bienestar de los más pequeños.
La calidad y las dosis impredecibles del CBD en niños
Es crucial entender que las cantidades y la calidad del CBD pueden variar considerablemente de una marca a otra. Un estudio reciente realizado en Estados Unidos destacó problemas preocupantes relacionados con la venta de gomitas con CBD, destinadas específicamente a niños para favorecer el sueño y reducir la ansiedad. Los investigadores descubrieron que algunas marcas presentaban dosis mucho mayores a las indicadas en la etiqueta. Los consumidores no estaban informados sobre las concentraciones reales presentes en estos productos. Estos hallazgos no son únicos, como explica la profesora de farmacología.
Y según los resultados, los científicos lanzan una alerta: "El consumo de gomitas de melatonina según las instrucciones puede exponer a los niños a cantidades de melatonina entre 40 y 130 veces superiores". Según la revista Prescrire, la melatonina no es más eficaz que un placebo a corto plazo para tratar problemas de sueño. De hecho, puede causar efectos adversos, como dolores de cabeza, convulsiones, ansiedad, trastornos depresivos y problemas digestivos.
Del mismo modo, los niños son particularmente vulnerables, especialmente si toman melatonina fuera de un contexto médico. Algunos especialistas incluso sospechan que los productos a base de melatonina tomados a largo plazo podrían afectar su crecimiento.
En Francia, aunque no existen datos específicos sobre intoxicaciones infantiles, la Agencia del Medicamento (ANSM) y la Anses recomiendan evitar la melatonina en niños, adolescentes, mujeres embarazadas y lactantes, a menos que haya una autorización de comercialización o un marco de prescripción compasiva.
El riesgo de otras sustancias desconocidas en los productos a base de CBD
Otro problema importante radica en la posibilidad de que los productos a base de CBD destinados a niños contengan otras sustancias cuyos efectos aún se desconocen. La profesora advierte sobre la presencia potencial de CBD asociado a cannabinoides sintéticos, o incluso productos que no contienen CBD en absoluto, sino solo cannabinoides sintéticos. Esta situación subraya las incertidumbres relacionadas con la composición de estos productos y los riesgos potenciales para la salud de los niños.
Los riesgos de interacciones medicamentosas con el CBD en niños
La profesora menciona un caso específico que ilustra los riesgos de interacciones medicamentosas asociadas al uso de CBD en niños. Ella menciona el caso de una niña de 13 años con un cáncer grave que tomaba medicamentos para aliviar su dolor. En solo unos días después de consumir aceite de CBD comprado en línea, cayó en coma. Los médicos descubrieron que esta situación se debió a la administración de CBD por parte de los padres. Este caso alarmante subraya las consecuencias potencialmente graves de un uso inapropiado del CBD en niños.
Por lo tanto, es imperativo tener en cuenta estos riesgos y actuar con prudencia cuando se trata de dar CBD a un niño. También es esencial consultar a profesionales de la salud competentes para obtener consejos e información precisa adaptada a cada situación individual. La seguridad y el bienestar de los niños deben ser siempre la máxima prioridad cuando se trata de su salud.
¿A partir de qué edad se puede tomar CBD sin peligro?
En cuanto al uso del CBD, no hay un consenso claro sobre la edad a partir de la cual puede tomarse sin peligro. Pero en Francia, la legislación vigente fija la edad legal para beneficiarse legalmente del CBD a partir de los 18 años, es decir, la mayoría de edad. Además, es importante señalar que cada individuo es diferente y que los efectos del CBD pueden variar de una persona a otra, según diversos factores como la edad, el peso, la salud general y las posibles interacciones medicamentosas.
¿Qué concluir?
Para resumir, no se puede dar CBD a los niños. Es comprensible que algunos padres puedan sentirse tentados a dar CBD a sus hijos, considerado un producto natural, para aliviar sus ansiedades, favorecer el sueño o mejorar su concentración en clase. Sin embargo, es importante señalar que el CBD no debe usarse para calmar a los niños, y en Francia, su venta está prohibida a menores.
En ausencia de datos científicos sólidos, es importante adoptar un enfoque prudente y privilegiar los tratamientos médicos aprobados cuando sea necesario. Dicho esto, manténgase atento a la información más reciente y a los desarrollos relacionados con el CBD manteniéndose informado.